Aquí no se tira nada

 Venimos tratando de captar la esencia de la personalidad local. Ardúa tarea para los forasteros, que así les llaman a los que no han nacido aquí, o habiendo sido nacidos en la zona viven lejos. Las relaciones personales se suceden sin un desarrollo lógico-gradual. La desconfianza es un factor común porque cualquiera te puede robar la matanza. La autosuficiencia y el máximo aprovechamiento son la tónica general de la región. No hay desperdicios (aunque sí vertederos). Todo el mundo sabe de todo y las rencillas afloran sin verlas venir. Todo tiene dueño y la propiedad privada sólo puede ser transgredida por el mismísimo Dios, y con causa justificada. La gente es muy generosa, pero tienen que saber de quién eres. S.